Las neurotrofinas, una familia de proteínas formada por diversos factores, han sido identificadas como un elemento importante en el tratamiento de enfermedades neurodegenerativas. Hace años, la revista Nature publicó que uno de los factores integrados en ellas evitaba la muerte neuronal en modelos de lesiones cerebrales en primates y ratas, pero también evitaba la disfunción cognitiva en estos animales en edades avanzadas.
Estudios sobre la función cognitiva (memoria, atención, independencia funcional, etc.)
En 2009 la revista internacional Phytotherapy Research publicó el artículo científico Improving effects of the mushroom Yamabushitake (Hericium erinaceus) on mild cognitive impairment: a double-blind placebo-controlled clinical trial en el que se recogían los resultados de un estudio a doble ciego y controlado por placebo realizado a 30 individuos de 50-80 años que presentaban un deterioro cognitivo leve (de acuerdo con la Escala de Demencia de Hasegawa).
Estudios sobre procesos oxidativos
El daño oxidativo también es común en el cerebro de pacientes con alzhéimer. Los resultados de un ensayo con 42 sujetos se publicó en el artículo Triterpenoids and polysaccharide peptides-enriched Ganoderma lucidum: a randomized, double-blind placebo-controlled crossover study of its antioxidation and hepatoprotective efficacy in healthy volunteers.
Estudios sobre la degeneración sináptica
La degeneración sináptica, lo que podríamos explicar y resumir como la desaparición de la comunicación entre neuronas, es clave en el proceso neurodegenerativo de la enfermedad de Alzheimer. Así se recoge en otro reciente estudio con Ganoderma lucidum publicado en 2008: Antagonizing beta-amyloid peptide neurotoxicity of the anti-aging fungus Ganoderma lucidum.